Después de haberla pasado bomba en el tour de cataratas de casa Parra en Santa María de Dota, almorzamos pasados por agua en el centro, y seguimos nuestro camino hacia Providencia de Dota, donde pasaríamos la noche. Nos costó llegar, el punto en el mapa de google maps/waze lo manda a uno a otro lado (más adelante le dejamos el enlace de la ubicación correcta) pero básicamente es bajar desde ojo de agua hacia Providencia, pasar el pueblo, llegar a la intersección de la piedra, hacer derecha y seguir el camino hasta ver el rótulo de Armonía Ambiental.
Comida y bienvenida a Armonía Ambiental
Con aguacero y todo, doña Noire salió a recibirnos: “¿Ya comieron?, ¿No quieren un pancito, un agua dulce, un cafecito?”. Ya habíamos comido, pero yo ya conocía la comida de doña Noire entonces dijimos que sí sin pensarlo. Además Dani nunca dice que no a un agua dulce. Comimos riquísimo, una sopita con arroz, una galletitas y agua dulce, y es que aquí lo reciben a uno como si fuera familia, deveras que se siente muy bonito. Nos enseñaron las cabañas y pal sobre los 4, a descansar.
La cabañas son bien sencillas y tienen ventanas de madera que no dejan pasar nada de luz al cuarto, con la oscuridad abosoluta y unas buenas cobijas para el frío dormimos riquísimo. Dani y Virgi me despertaron antes de las 6am y para no despertar a Mamá salimos del cuarto. Nos dimos cuenta que nos habíamos despertado en el paraíso. Las montañas de Providencia siempre verdes e inmensas nos dieron ahora sí la bienvenida escondiendo todavía el sol que se asoma por ahí de las 7. En la foto de portada se ve muy inda pero nada comparado a verla en vivo oírla y sentirla.
Desayunamos frutas, queso hecho en casa, pancito, pinto y galletitas. Las galletas que no nos pudimos comer, doña Noire nos la puso en una bolsita para llevar al tour que nos iba dar Darío. Darío es el hijo menor de doña Noire, tiene un interés y conocimiento grandísimo por todo lo que es la naturaleza, entonces la pasamos súper bien con él preguntándole de todas las especies de árboles, y pájaros que vimos.
Tour por las montañas de Providencia
Las cataratas más conocidas de Providencia, como el Pocerón fueron cerradas temporalmente por el ministerio de salud (la gente no respetaba las burbujas), sin embargo Darío se conoce todos los rincones de Providencia y nos tenía un tour especial preparado. Empezamos a caminar sendero abajo pasamos una cerca, paramos a bajar un par de naranjas y rapidamente estabamos en el bosque. Después de caminar unos minutos nos dice Darío viendo hacia arriba, “ahí se puede dormir” Una telaraña tejida con hilos extra fuertes (200lb de resistencia cada hilo) a unos 40m de altura. Se sube con un arreglo de cuerdas y arnés, ya arriba se está todo el tiempo con arnés y se pueden, escuchar los monos, pájaros y un paisaje espectacular. Nos contaron, pero para nosotros papás con peques hay otras opciones.
Seguimos caminando y salimos a un cafetal de variedad tipo Geisha, un café que Armonía ambiental cosecha para exportación. Continuamos un poco más y vimos la cueva del Puma. Le dicen así porque se encontraron varias veces al Puma durmiendo ahí hace tiempo, ahora tienen una telaraña o treenet para dormir que se agarra de la cueva y árboles, y está a 3m de altura. En esta si se puede subir y pasar la noche en familia con los peques. Cuenta con un fogón para cocinar, una mesa comedor flotante debajo de la telaraña y baño compostable. Hay que llevar bolsa de dormir para llevar la noche. Nosotros pasamos la noche en las cabañas de doña Noire, sin embargo la próxima de fijo pasamos una noche en la cueva del Puma. Según dice Darío, en la telaraña hay campo para hasta 8 personas.
Tenemos un lugar para que los coleecione y los observe
Catarata las 3 caídas
La cueva del Puma estaba muy muy cómoda y divertida. Virgi, Dani y Mamá no tenían muchas ganas de irse, sin embargo nos faltaba bastante aventura y ya pasado el medio día se viene el aguacero así que empezamos caminar sendero abajo. Dani quería siempre ir adelante corriendo como un loquillo por el trillo, detrás Darío pero luego llegamos a un punto donde el sendero se pone más resbaloso y técnico además empezó a lloviznar, por lo que bajamos el paso y nos pusimos las capas. No mucho después nos encontramos la catarata las 3 caídas a mano derecha del trillo. Se puede bajar a la tercera caída, donde el agua llegaba apenas a media pantorrilla, la caída de agua no es tan fuerte entonces está rico para meterse un poco debajo de la catarata.
Continuaba lloviendo y queríamos hacer una parada técnica para comernos las galletitas que nos había dado doña Noire, Darío conoce una cueva donde podíamos parar al borde del río, entonces seguimos bajando hacia el Río Brujo (que es afluente del Saavegre) sin embargo estaba súper crecido, tanto que nos daba miedo meter los pies =P. Todo un espectáculo, pero mejor de lejitos. Hicimos merienda debajo de una roquita, y de vuelta a Armonía Ambiental.
De vuelta, antes de ir almorzar pasamos a la huerta etnobotánica de doña Noire. Si tuviera que describirlo con pocas palabras, diría que es un bosque de cosas para comer, y es que no sé si sabían pero casi el 100% de las cosas que se comen se producen en la misma finca. Nos cuenta Darío que la biodiversidad misma de la huerta, y el tener algunas plantas de olor fuerte como la “Ruda” son la clave para el control de plagas y no usar ningún tipo de pesticida.
Después de una ducha rápida, nos fuimos a almorzar y se vino un súper aguacero, por lo que nos quedamos en el comedor un rato largo hablando con don Orlando y doña Noire. Luego nos fuimos a refugiar a la cabaña para esperar la cena. Hicimos lo posible para que los peques se durmieran pero sin éxito, por lo que disfrutamos del dulce placer de no hacer nada por un rato, hablar, pensar y simplemente descansar. Una actividad beneficiosa tanto para niños y grandes.
Cenamos unos macarrones con salsa de tomate y un pancito integral riquísimo que hace doña Noire y pal Sobre. A la mañana siguiente desayunamos y nos despedimos súper agradecidos con la familia de doña Noire y don Orlando. Aprendimos montones de su sabiduría, de su visión del mundo, y de que es posible vivir de una manera más sustentable con la naturaleza. Hasta vinimos inspirados para hacer nuestra propia huerta orgánica en casa.
En Resumen:
Nivel: Bajar a la catarata nivel Intermedio-avanzado. Pero le están metiendo trabajo al sendero para que sea más accesible. Para llegar a la catarata hay que hablarse con Darío. Preferiblemente llegar con carro alto a Armonía Ambiental, un automóvil si llega pero hay que llevarla más suave nada más.
Contacto: Doña Noire: 87071102
Cómo llegar: Llegar a Ojo de Agua por la interamericana y dar derecha (si vienen de Cartago) se baja hasta Providencia, se pasa el pueblo directo. En el cruce de la Piedra dobllar a la derecha y seguir hasta ver el rótulo de Armonía Ambiental. Pueden también seguir la ruta del GPS: Armonía Ambiental
¿Qué llevar?: Merienda, Calzado y ropa adecuada para ríos, mudada de cambio, repelente, bloqueador, abrigo y capa. Para los niños/bebés recuerden pueden llevar cargador.
